Herramienta de detección diferencia la parálisis supranuclear progresiva y la enfermedad de Parkinson

La ECAS [pantalla de ALS cognitiva y conductual de Edimburgo], una evaluación de 15 a 20 minutos que se utiliza para detectar cambios cognitivos y de comportamiento en los trastornos motores, puede ser una herramienta simple y efectiva para la diferenciación de la parálisis supranuclear progresiva (PSP) de Enfermedad de Parkinson (EP), según un estudio en la enfermedad de Parkinson.

Se reclutó a un total de 11 pacientes con PSP y 30 con EP ingresados ​​en un hospital especializado en neurología y neurocirugía en el Reino Unido. La duración media de la enfermedad para PSP y PD fue de 3.73 años (rango, 1 a 11 años) y 5.67 años (rango, 0 a 14 años), respectivamente. Los investigadores también reclutaron 40 controles, ninguno de los cuales tenía antecedentes psiquiátricos o neurológicos.

Los investigadores emplearon el ECAS, que evaluó la fluidez verbal, la función ejecutiva, el lenguaje, la memoria y los dominios visoespaciales. El puntaje máximo en el ECAS es 136, con puntajes más bajos que demuestran un peor desempeño. El deterioro se definió como una puntuación de <2 DE en el ECAS.

Los pacientes con PSP tuvieron puntuaciones más bajas en el ECAS en comparación con los pacientes con EP y controles; los pacientes con EP también mostraron puntuaciones más bajas de ECAS en comparación con los controles (todos P <.017). Se demostró un peor desempeño en los dominios de fluidez verbal, lenguaje, función ejecutiva y memoria en pacientes con PSP frente a aquellos con EP y controles (todos P <.017). Los pacientes con EP mostraron peores puntajes en la función ejecutiva en comparación con los controles (P <.017).

En el análisis post hoc de dominios individuales, los pacientes con PSP obtuvieron un rendimiento significativamente peor en fluidez que aquellos con EP y controles (todos P <.017), con un efecto significativo del diagnóstico en la fluidez fija (F [2, 21.63] = 8.30 ; P <.017) y fluidez libre (F [2, 23.16] = 15.19; P <.017).

Se observaron efectos grupales similares en la ortografía (F [2, 76] = 10.58; P <.017), recuerdo inmediato (F [2, 24.04] = 11.47; P <.017), retención (F [2, 20.69] = 8.92; P <.017), intervalo de dígitos inverso (F [2, 25.96] = 7.60; P <.017), alternancia (F [2, 22.92] = 5.66; P <.017) y cognición social (F [ 2, 20,42] = 9,49; P <0,017). La fluidez fue el mejor predictor de PSP, representando una especificidad y sensibilidad de 80% y 82%, respectivamente (AUC 0.84; SE = 0.08; P <.01).

Se encontró que el ECAS es altamente específico (86.8%) y sensible (91.0%) para diferenciar a los pacientes con PSP de los controles (AUC 0.91; SE = 0.67; P <.001). Además, se descubrió que el ECAS demuestra especificidad (76.7%) y sensibilidad (72.7%) para distinguir entre PSP y PD (AUC 0.80; SE = 0.09; P <.01).

Los investigadores sugieren que «el ECAS es adecuado para el uso junto a la cama para detectar el deterioro cognitivo en los síndromes parkinsonianos y para distinguir diferentes perfiles cognitivos dentro de estos, con el fin de apoyar el diagnóstico diferencial».


Fuente:
Foley JA, Niven EH, Paget A, et al. Sensibilidad y especificidad de la ECAS en la enfermedad de Parkinson y la parálisis supranuclear progresiva. Parkinsons Dis. 2018; 2018: 2426012.